Zafón

Valverde, España

“—Daniel, lo que vas a ver hoy no se lo puedes contar a nadie”

Recorro de nuevo las calles de una Barcelona maldita
De tu mano, de tu sangre en tus letras
Me muestras la magia que hay en las páginas de los libros viejos
Haces temblar mis ojos y mis manos al leerlos

Subo y bajo la Rambla
Grito y callo palabras
Me susurras con gestos
Y me vendes un mundo complejo

Y me introduces a un lugar que no conozco
Y me presentas amigos del más allá
Fermín, Sempere y la Bernarda
Cuentos tienen para contar

Y un muchacho sin alma
Con los dedos rotos de escribir
Y un ángel sin alas
Malditos y benditos lo que venimos aquí

Recorro de nuevo las calles de neblina en un país desgraciado
Bajo la sombra del viento, besos inciertos
Mentiras que no hay que ocultar y sorpresas que matan
Me pierdo entre tus páginas

Fumo cigarrillos de papel cual Laín
Y lloro al cerrar tus palabras

Y al terminar esta canción me olvidarás
Como si nunca nos hubiéramos conocido
Como si me hubieras encontrado en uno de tus escritos
Como en aquel cementerio cualquier libro perdido

Para Carlos Ruiz Zafón,
quien me hace soñar entre lágrimas